EL FANTASMA JAVIER

Natalia es bajita, muy bajita, pero nunca le ha importado hasta que... Hasta que un alumno nuevo empezó a meterse con ella por su tamaño. Como si fuese contagioso, se dejaron arrastras sus compañeros de toda la vida, sus amigos de siempre. Ahora Natalia se siente mal, es el blanco de las burlas de sus compas de clase. Pero no se rinde: Ha pensado una venganza.
La venganza no siempre es buena idea. A veces se nos escapa de las manos. Así, donde ella veía juego, se ha encontrado con un Fantasma, El Fantasma Javier, revoltoso, muy revoltoso. Sobre todo los sábados. ¡Y hoy es sábado!
Lámparas que se encienden y se apagan solas, papeles que aparecen escritos, espejos en los que se leen mensajes... Un fantasma que se deja sentir, que está ahí, quizás a tu lado.
Y muchos, muchos sustos.

El Fantasma Javier es una comedia cargada de sustos, de mensajes, de risas, de miedo. Porque las emociones se suceden, como en la vida. A fin de cuentas, no es más que un trocito de la vida de Natalia, su protagonista.

El Fantasma Javier es cuento, porque se narra una historia de principio a fin; es magia, porque todo lo fantástico que se cuenta, ocurre de verdad. por imposible que parezca.

JUAN SIN MIEDO

- Papa, ¿tú sabes lo que hay que hacer p'a tener miedo?
- No se dice "p'a tener", se dice "para tener".
- Bueno, pues p'a eso.

¡Buenas noches! Sí, he dicho "buenas noches" y más vale que me contestes porque si no...

Juan no sabe lo que es el miedo. Constantemente le pregunta a su padre acerca de él. El progenitor, harto de tanta insistencia, decide hablar con el sacristán, el bromista del pueblo y especialista en dar "unos sustos... ¡De muerte!"
El fracaso es sonado.
Juan, en busca del miedo, viajará por mundos extraños, dormirá junto a delincuentes ahorcados, y tratará de romper el maleficio que impide que el rey, y su hija, la princesa, puedan vivir en su castillo.
Se enfrentará a tigres feroces que intentarán destrozarle la cara con sus garras.
Luchará contra una momia asesina, enviada al mundo de los vivos para acabar con su vida.
Conocerá a hombres que son, según deseen, uno entero y dos mitades.
Triunfará y se casará, hasta que un día, de la mano de la princesa, su esposa, descubrirá lo que es el miedo.






Juan sin Miedo nació (en 2012) con vocación de "asustar" a los peques de ocho y nueve años. Quería algo que les mantuviese en tensión, que les hiciera pensar en que detrás de un susto viene otro... Y creo que lo conseguí.

Juan sin Miedo nació siendo un poco más barroco de lo que es hoy, Lo adorné con juegos de magia que luego suprimí. No hacían falta, casi ,casi estorbaban.

Juan sin Miedo quedó entonces reducido a la narración, a los juegos de voces, al mimo, al gesto y a las poses... Al susto, al miedo, a la risa...

Y me gusta.
Y les gusta.

EL BRUJO QUETESTRUJO

Tengo 632 años.

Sí, aunque no te lo creas, tengo 632 años. Para demostrártelo, te contaré lo que me ocurrió hace mucho tiempo, en un país muy lejano, en el que, cuando nació una princesa, sufrió la maldición peor que haya existido jamás... ¡Cada vez que cumpliese años, le olerían peor los pies!

Así me enfrenté con el Brujo Quetestrujo, que me arrestó y me escapé; volvió a arrestarme y me fugué de nuevo. Al final, le derroté.



"El Brujo Quetestrujo" es un cuento antiguo, del año 2002. Nació como historia para niños y niñas mayores de 10 años, pero con los tiempos, con la irrupción de internet, con la globalización de los saberes y con la temprana maduración de los niños, he rebajado un poco la edad de sus destinatarios.

Es un cuento nuevo que reúne todos los mitos de las historias populares. Es un cuento con juegos de magia muy ingenuos, pero que atrapan al niño. Es uno de esos cuentos que me han dado satisfacciones y más satisfacciones.

EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR

Un Rey enamorado de sí mismo, de verse guapo, de sentirse elegante.
Dos estafadores convencidos de que, gracias a su maña, lograrán sacarle los cuartos al emperador. Y lo consiguen, que le venden el tejido mas maravilloso que jamás haya existido. Una tela que sólo pueden ver los inteligentes. Si no la ves, es que eres tonto. Tonto de remate, Tonto de capirote. Rematadamente tonto.
Y, aunque el rey no ve nada, dice que la ve. no vayan a tomarle por lo que es: tonto, tonto, tonto.

A partir de diez años

LA CASA INCENDIADA

Me llamo Fernando Saldaña y soy cuentacuentos, pero no siempre me he dedicado a este oficio. Hasta hace unos años era investigador privado, un trabajo aburrido en el que, a veces, pasan cosas extraordinarias. El caso que os voy a contar es uno de esos.

Durante algún tiempo quise contar historias de miedo a los alumnos de 5º y 6º, pero aquello que narraba les provocaba cierta frustración. ¡No ha dado miedo!, me decían. Porque los sustos son sustos, pero el miedo, el auténtico miedo, es otra cosa, otro sentimiento.
Así nació La Casa Incendiada, con menos sustos, con una especie de terror psicológico que hace que duela el silencio en la sala.
Un misterio sin resolver, unos cuadros que recuerdan cómo murieron los protagonistas. Unas apariciones indeseables... Y algo de magia. poca, que la magia está en la palabra, en el rico vocabulario, en el gesto. La magia está en La Casa incendiada.

Uno de los espectáculos que más alegrías me ha dado. Por la reacción del público. Por el silencio cómplice que genera. Porque lo recuerdan muichos años después.

LA LEYENDA DEL VIAJERO QUE NO PODÍA DETENERSE

Kostia es un muchacho que no puede caminar.

Un duende le devuelve las piernas y la alegría.

Desde entonces recorre el mundo, porque no puede permanecer en el mismo lugar más de tres días seguidos: de lo contrario, se convertirá en árbol.

Muchas aventuras, y el primer amor que surge bajo la lluvia, el miedo y las adversidades.

Al final, en un pueblecito perdido en la Rusia natal de esta leyenda, hay un árbol. quien se sienta junto a él recobra las fuerzas y olvida el cansancio.

Basado en el libro del mismo título de Carmelo Salmerón y Concha López Narváez.

Una historia sencilla, tierna, cargada de sensibilidad, vocabulario y silencio.

6 A partir de doce años

Odio la poesía

Un trabajo de Instituto. Cinco alumnos con personalidades muy dispares. Un malentendido y un resultado sorprendente.

¿Qué es para ti la poesía? -le pregunté-. ¡La poesía es una mierda! -respondió David- ¡Odio la poesía! -sentenció-

Y nació un  espectáculo en el que se recogen poemas que nos invitan a pensar que vivimos en un mundo que no nos gusta. En un mundo de mierda, por utilizar las palabras de David.

Textos de León Felipe, del Romancero español, de Quevedo, de Gabriel y Galán. La soledad, la muerte; la violencia contra la mujer; el dinero; los desahucios...

Un espectáculo en el que humor y reflexión se dan la mano. En el que la risa y las lágrimas pueden encontrarse.

666

666 es el número del diablo. Y de él vamos a hablar. Moviéndonos por los pueblos, por las ciudades, por diversos rincones.

Leyendas populares en las que Satanás cobra protagonismo máximo, en las que los hombres luchan contra él o se hacen sus aliados.

Y magia. Un juego de magia adornando cada historia.

Normalmente se cuentan tres historias que se acompañan con los correspondientes juegos de magia. 

En este espectáculo las leyendas cambian para adaptarnos a la provincia en la que nos encontramos. Siempre busco alguna historia de la tierra en la que me encuentro, en la que el diablo sea protagonista de hechos y sucesos. Para que no se pierdan, para que se popularicen.

He de reconocer que, por gusto personal, las que más repito son la de El Sillón del diablo, de Valladolid, y la de La Cueva de Salamanca, de Salamanca.

Historias contadas con frecuencia:

Asturias: El diañu burlón.

Ávila: El ameal de Pablo.

Badajoz: La ventana del diablo

Madrid: La pisada del diablo.

Salamanca: La cueva de Salamanca.

Segovia: La construcción del acueducto.

Toledo: La mano del diablo.

Valladolid: El sillón del diablo.

Zamora: El diablo de Almaraz.

7 A partir de 14 años

LA CELESTINA

Uno de los libros que más me costó leer, fue La Celestina. La lata es que era de lectura obligatoria en el Instituto y se me atragantó... Y se me atragantó... Y se me atragantó.
Tardé muchos años en hincarle el diente y sólo lo conseguí tras imaginar en mi cabeza cada uno de los personajes como si fueran contemporáneos, colegas de paseo o instituto.
Aquella experiencia, años después, la subí a espectáculo. Una obra divertida, loca, improvisada, amorcillada, pero que nos sirve para hacernos a la idea de qué es la Celestina, quién es quién en la obra y por qué pasa lo que pasa.

La Celestina lleva acompañándome desde mediados de los años noventa y no la retiro de cartel porque es de esos trabajos que sigues disfrutando cada día, de esos espectáculos en los que la novedad está en volver a representarlos.

EL CONDE LUCANOR

Durante muchos años trabajé en un centro de menores. Uno de los perfiles de muchachos, era el del infractor. El quinqui, que dicen muchos. A medida que fui conociéndoles, a medida que me enteré de sus historias, descubrí que el bien y el mal no son conceptos absolutos.

Convertido en Patronio del siglo XXI, narro alguno de los cuentos al tiempo que refiero historias reales de algunas chicas y chicos con los que compartí magia, circo y vida.
El resultado es un espectáculo abierto al debate, a la polémica, a la controversia.
Cuentos, vidas reales, magia.
Historias de ilusión y realidad que nos ayudan a entender un mundo distorsionado, desenfocado, diferente. Porque no hay verdades absolutas.

8 Adultos